El objetivo de este proyecto de ordenanza del concejal de UCR-Juntos por el Cambio, es reconocer y apoyar esta actividad por ser una pieza fundamental de la industria creativa y educativa. Además, la iniciativa que se trabajó junto con el Movimiento Santafesino de Danzas, establece la confección de un registro de trabajadores del sector.
“Este proyecto de ordenanza tiene el objetivo de que el Estado reconozca el valor de la danza en nuestra ciudad, como actividad transversal de salud física, mental y espiritual, a la educación popular, la cultura y la industria creativa. También reconocer como trabajadores a quienes son parte como los bailarines, coreógrafos, maestros, productores, directores”, señaló el concejal de UCR-Juntos por el Cambio en relación a la iniciativa ingresada al Concejo Municipal.
La propuesta, que fue elaborada junto al Movimiento Santafesino de Danzas, establece la creación de un registro de trabajadores de este sector, que contenga a quienes cumplen una función directa e indirecta con la actividad. “No existe hasta el momento ninguna otra ciudad del país que cuente con una regulación semejante. Santa Fe sería pionera en reconocer al sector de trabajadores y hacedores de la cultura vinculados al arte de la danza. Creemos que es una iniciativa justa, histórica y necesaria”, afirmó el edil.
Por otra parte, la iniciativa establece la creación del Consejo Santafesino de Danza, que tendrá como objetivo la promoción, estimulación, preservación, fomento y apoyo de la actividad; como así también la implementación de políticas público-privadas en este sentido. “El fomento de la danza por parte del Estado es una necesidad imprescindible para sus hacedores; pero también para los destinatarios de la misma”, indicó el legislador.
El proyecto de ordenanza estipula que el espacio sea conformado por representantes del Ejecutivo, del Honorable Concejo Municipal y trabajadores de la danza que ejerzan la actividad profesionalmente, con un mínimo de 5 años de antigüedad. Entre sus funciones se encuentran la implementación del programa “Santa Fe en Movimiento”, promover y permitir el acceso a permisos del uso del espacio público para el desarrollo de intervenciones, facilitar lugares de ensayo, entre otras cuestiones.
“Año a año, la población de este sector aumenta cuantitativamente y se diversifican cualitativamente sus dominios. Transitamos una época de cambio de paradigmas y no podemos negar que se necesitan otro tipo de políticas para una disciplina que existe y se desarrolla impulsada y sostenida exclusivamente por sus propios hacedores”, sostuvo Carlos Suárez.